The Köln Concert
Dirección, coreografía, escenografía, sonido y vestuario TRAJAL HARRELL Música KEITH JARRETT, JONI MITCHELL
ESPECTÁCULO PARA 7 INTÉRPRETES
Durante mucho tiempo el coreógrafo estadounidense Trajal Harrell soñó con poder bailar The Köln Concert, la interpretación de piano única de Keith Jarrett.
ora en la cima de su arte, responde sintetizando sus influencias.
El coreógrafo estadounidense Trajal Harrell es un artista proteico que mezcla alegremente el baile callejero y el pensamiento filosófico sobre el género, el decolonialismo y el feminismo.
Conocido gracias a sus series Veinte miradas o París arde en la iglesia de Judson, este coreógrafo divertido y sensible busca incansablemente magnificar al ser humano en su diversidad. Y eso es exactamente lo que sucede en The Köln Concert.
En la pieza que presentan en el Central, basada en uno de los álbumes de jazz más vendido de todos los tiempos —el famoso Concierto de Colonia de Keith Jarrett, el virtuoso pianista de jazz de renombre mundial— Trajal Harrell y sus seis cómplices despliegan danzas individuales en la encrucijada de los géneros, mezclando los movimientos en boga, el teatro Noh y las pinturas de jarrones de la antigüedad griega... Como escalas en un piano desafinado que escribe una partitura en el espacio, los intérpretes, a su vez, se elevan y se despliegan. Alternativamente aves del paraíso o flores negras venenosas, llamas incandescentes donde el negro es color, los bailarines magnifican las notas del piano y encarnan una forma de gracia. En el escenario, siete bancos para piano, uno para cada intérprete. Una partitura sorprendente les da la bienvenida.
En 1975, a su llegada a la Ópera de Colonia, Keith Jarrett se dio cuenta de que el piano que iba a tener que tocar no era el adecuado. Molesto, se lanzó no obstante a una improvisación de una hora de duración, que se convirtió en uno de los álbumes más vendidos de la historia de la música clásica y del jazz: The Köln Concert.
Trajal Harrell por su parte se enfrenta a la partitura con delicadeza y asocia a Keith Jarrett con cuatro canciones melancólicas de Joni Mitchell.
El coreógrafo estadounidense transforma El Concierto de Colonia en una danza que se convierte en un encuentro de diferentes voces y visiones del mundo. Una forma de lenguaje universal que muestra toda la energía vulnerable de los cuerpos y las identidades en escena.