SEMILLA DE MIRTO
Estilo: Danza
Ser diosa no es la perfección, sino esculpir nuestro trono desde el fango que vamos encontrando en el camino.
Ser diosa no es ser inmortal, pero sí que jamás muera la libertad.
Ser diosa es encontrarse en sí misma desde la raíz, desde la búsqueda, desde la tierra, desde la naturaleza; es conectar con tu esencia tanto que el olor a ti nada ni nadie pueda eliminarlo.
El espectáculo está basado en una conjugación de flamenco e interpretación con la ayuda de dos elementos clave: telas y tierra. Las telas hacen referencia al castigo o las ataduras que los juicios o simplemente la casualidad nos imponen durante nuestro trayecto.
La tierra es la libertad, siempre presente, pero a veces imperceptible.
Sucede en un espacio atemporal donde se recrean situaciones del mundo de una diosa, más humana de lo que jamás imaginaríamos.
Después de un proceso de investigación sobre la mitología griega, y relacionándolo con la mujer, sentí la necesidad de conocer más en con Sucede en un espacio atemporal donde se recrean situaciones del mundo de una diosa, más humana de lo que jamás imaginaríamos.
Después de un proceso de investigación sobre la mitología griega, y relacionándolo con la mujer, sentí la necesidad de conocer más en concreto a una de divinidades del Olimpo: Afrodita. En ese proceso de búsqueda realicé una coreografía inspirada en ella que me dio las claves para desarrollar toda la obra.
El tema sobre el cual se crea esta primera pieza es Gallo Rojo de Coetus junto a Silvia Pérez Cruz. Esa creación me permitió encarnar a la diosa, y con ella a todas las diosas que podemos ser y somos. En lo referente a lo musical, el resto de piezas tienen como base palos tradicionales del flamenco. No obstante, las letras son una composición propia debido a la necesidad de crear unas letras que acompañen lo que he querido transmitir en cada escena.