De haber nacido
Estilo: Danza
Interpretación MARÍA MUÑOZ Dirección artística MARÍA MUÑOZ, PEP RAMIS Colaboración en la dirección y audiovisuales LEO CASTRO Colaboración musical QUITERIA MUÑOZ (soprano), JOEL BARDOLET (violín), BRUNO HURTADO (viola de gamba y violón)
¿SE PUEDE BAILAR LA VIDA ES SUEÑO DE CALDERÓN? LA RESPUESTA NOS LA DA MARÍA MUÑOZ EN DE HABER NACIDO. SÍ, ES POSIBLE.
SOMOS HUMANOS PORQUE SOMOS CUERPO Y LENGUAJE. Y DE ESO SABE MUCHO TODO EL NÚCLEO DURO DE MAL PELO CON PEP Y MARÍA AL FRENTE.
Mal Pelo lleva a cabo una propuesta escénica inspirada principalmente en La vida es sueño, de Calderón de la Barca, a la que enriquecen con extractos de Calderón, obra teatral de Pier Paolo Pasolini. Para ello, han creado un montaje caracterizado por la hibridación de lenguajes, en el que utilizan el cuerpo, el movimiento, la palabra, la iluminación, la imagen audiovisual y un espacio sonoro rico y dinámico. Y es que de contaminar sintaxis sabe mucho e imparte magisterio en nuestro país y fuera de nuestras fronteras María Muñoz, artista y creadora con mayúsculas, que ha dejado rastros de su excelencia y sensibilidad en multitud de ocasiones sobre nuestros dos escenarios. En el caso de la producción que ahora nos ofrece Mal Pelo sube la apuesta con este “pequeño/gran espectáculo”.
La propuesta parte del reto que lanzó a Mal Pelo la Compañía Nacional de Teatro Clásico a través de Lluís Homar y Xavier Albertí para participar en el programa “Diálogos contemporáneos” sobre la base de una obra clásica, pero desde un lenguaje actual y en el caso de esta compañía, también, desde una disciplina diferente a la de texto.
De haber nacido se acerca a La vida es sueño desde la mirada personal de María Muñoz, eligiendo como inspiración el personaje de Rosaura, cuyo destino está marcado por unas coordenadas de conflicto a las que decide enfrentarse.
La propuesta está dividida en tres sueños o momentos que presentan en escena a una Rosaura andrógina en busca de su libertad de identidad. Pero María Muñoz resalta que este personaje comparte los caracteres de Rosaura y Segismundo. En este juego, son imprescindibles los monólogos calderonianos que permiten adentrarse en lugares profundos del alma del personaje y que se corresponden con los solos en danza. Todo ello, lleva a Mal Pelo a crear un lugar simbólico habilitado para el retrato y la ficción.