Escena en Sevilla

Genio, ingenio y figura en estado de feliz plenitud artística, KUTXI ROMERO aprovecha los descansos de Marea de la única manera que sabe hacer, dando rienda suelta en a su creatividad. Fraguando nuevas canciones (por
ejemplo) y saliendo por ahí a tocarlas de forma más íntima, con sus fieles escuderos Pete y Juanito acompañando
con sus guitarras al maestro.
Siendo esto así, en sus próximos conciertos, ya más de 100 los ofrecidos por Romero en solitario, el bandolero de Berriozar tocará canciones que integran su primer álbum, No soy de nadie, así como algunos clásicos atemporales
de Marea y significativas versiones de artistas por él admirados: en algunos de los casos, verdaderamente sorprendentes los resultados. En electrizante formato acústico, derrochando todo ello arte a puñados de a mucho.
Siempre en febril estado de actividad, la arrolladora creatividad de Kutxi Romero se tornó en 2016 arrullador
torrente de musicalidad en No soy de nadie, proyecto personal con el que el carismático cantante de Berriozar, desde su mismo título, proclamó su independencia a todos los niveles. Seguir mandando en su hambre.
No soy de nadie fue ante todo un disco con alma y latido propio; catártico por momentos, hecho con el corazón y con
las tripas. Una retrataura o radiografía sonora de Kutxi lejos de coraza alguna.
Sin herrajes ni tapujos, dando rienda suelta Romero al niño grande que lleva dentro. Haciéndolo como el consumado maestro que es a la hora de navegar en cualquier mar, con independencia de cómo esté la marea: de todos es sabido que identidad y ADN no se pueden borrar.